sábado, 1 de enero de 2011

CAPITULO 13

Capítulo 13





CUANDO REGRESAMOS a nuestro cuarto, le di a Lissa la excusa que tenia que atender un asunto de guardianes. Ella estaba ansiosa de arreglar la pelea que había tenido anteriormente con Christian – probablemente en la forma de remoción de ropa — y no hizo pregunta alguna al respecto. Había un teléfono en mi habitación, y luego de llamar a una operadora, pude averiguar en que cuarto se encontraba Dimitri. El se sorprendió de verme en su puerta— y un poco desconfiado. La última vez que esto había sucedido, yo estaba bajo la influencia del encanto de lujuria de Víctor y me comporte... agresivamente. "Tengo que hablar con trigo," dije. El me dejo entrar, e inmediatamente le entregue la nota "V. D—" "Si, lo se," dijo Dimitri. Me regreso la nota. "Victor Dashkov." "Que vamos a hacer? dije, hablamos respecto a esto, pero ahora el realmente esta diciendo que nos venderá." Dimitri no respondió, y pude darme cuenta que estaba evaluando cada uno de los ángulos, tal y como lo haría en una pelea. Finalmente, saco su celular, lo que era mucho mas Cool que tener que usar el teléfono de la habitación. "Dame un minuto." Comencé a sentarme en su cama, decidí que eso era peligroso, y en su lugar me senté en el sofá. No sabía a quien estaba llamando, pero la conversación era en ruso. "Que esta pasando?" le pregunte cuando termino. "te lo diré pronto. Por ahora, tenemos que esperar." "Grandioso. Lo que mas me gustaba hacer." El halo una silla y se sentó al lado opuesto de mi. Parecía ser algo muy pequeño para alguien tal alto como el, pero, como siempre, el logro que funcionara y al mismo tiempo se vio elegante.
A mi lado estaba una de las novelas occidentales que siempre llevaba con el. La tome, nuevamente pensando en lo solitario que estaba. Aun ahora, en el Tribunal, el había escogido quedarse en su cuarto. "Por que lees estos?" "alguna gente lee libros por diversión" el me dijo. "Hey, cuida el sarcasmo. Y yo si leo libros. Los leí para resolver los misterios que amenazaban la vida y la cordura de mi mejor amiga. No creo que el leer este libro de vaqueros este realmente salvando al mundo como yo lo hago." El lo tomo de mis manos y lo abrió, el rostro pensativo y no tan intenso como siempre. "Como cualquier libro, es un escape. Y hay algo… mmm. No lo se. Algo atractivo acerca del viejo Oeste. Sin reglas. Todos Vivian sus vidas guiados por su propio código. No tenias que estar atado por las ideas de otros sobre lo que es bueno o malo para poder hacer justicia." "Espera," reí. "Pensé que yo era la que quería romper las reglas." "No dije que quisiera romper las reglas. Solo que puedo ver el atractivo." "No puedes engañarme, Camarada. Te quieres poner un Sombrero de vaquero y mantener a los ladrones de Bancos en línea." "No tengo tiempo. Tengo suficientes problemas manteniéndote a ti en línea." Me sonrei, y repentinamente, todo era como cuando limpiamos la iglesia—antes de la pelea, al menos. Sencillo. Confortable. De hecho, era como los viejos tiempos cuando comenzábamos a entrenar juntos, mucho antes de que todo se volviera tan complicado. Bueno, de acuerdo…las cosas siempre habían sido complicadas, pero por un tiempo, habían sido menos complicadas. Eso me puso triste.
Desearía que pudiésemos revivir esos días. Ahí no había ningún Victor Dashkov, ni sangre en mis manos. "lo siento," dijo Dimitri repentinamente. "Por que? Por leer malas novelas?" "por no ser capaz de traerte aquí. Siento que te decepcione." Pude lograr ver una sombra de preocupación en su rostro, como si estuviera preocupado por la posibilidad de haber causado un daño irreparable. La disculpa me tomo por completo desprevenida. Por un momento, me pregunte si el estaba celoso de la influencia que tenia Adrian de la misma forma en que Christian lo había estado. Entonces comprendí que era totalmente diferente. Le había estado dando a Dimitri un duro tiempo por que estaba convencida que el podía hacer cualquier cosa. En algún lugar —en lo profundo— el sentía lo mismo, al menos en lo concerniente a mi. El no quería negarme nada. Mi anterior mal humor se había desvanecido hace rato, y repentinamente yo me sentí drenada y estúpida. "No lo hiciste," le dije. "Yo me comporte como una completa malcriada. Tu nunca antes me habías decepcionado. Tu no me decepcionaste en esto."
La mirada agradecida que el me dio me hizo sentir como si tuviera alas. Si otro momento hubiera pasado, sospecho que el habría dicho algo tan dulce que yo hubiera volado lejos. En su lugar, su teléfono sonó. Otra conversación en ruso, y luego el se puso en pie. "De acuerdo, vámonos." "A donde?" "A ver a Victor Dashkov." Al parecer Dimitri tiene un amigo que tiene un amigo, y de alguna forma, a pesar de la mejor seguridad en el mundo Moroi, logramos entrar a las instalaciones de la prisión del Tribunal. "Por que estamos haciendo esto?" susurre mientras caminábamos por el pasillo hacia la celda de Victor. En verdad, en verdad esperaba muros de piedra y antorchas, pero el lugar lucia bastante moderno y eficiente, con pisos de mármol y paredes completamente Blancas. Al menos no había ventanas. "Crees que podamos convencerlo?" Dimitri negó con la cabeza. "Si Victor quisiera vengarse de nosotros, lo haría sin ningún aviso. El no hace las cosas sin una razón. El hecho que te dijera primero significa que quiere algo, y ahora vamos a averiguar que es." Llegamos a la celda de Víctor. El era el único prisionero que había retenido. Como el resto de las instalaciones su cuarto me recordó de algo que uno encontraría en un Hospital. Todo estaba limpio, con mucha luz, y estéril— y sin nada. Era un lugar sin ninguna clase de estímulos o algún tipo de distracción, lo que me hubiese vuelto loca en una hora. La celda tenía barras plateadas que lucían difíciles de romper, lo que era la parte mas importante. Victor yacía sentado en una silla, elegantemente examinando sus uñas. Habían pasado tres meses desde nuestro último encuentro, y verlo nuevamente hizo que mi piel se erizara. Sentimiento que no sabía que estaban enterrados dentro de mi repentinamente salieron a flote. Una de las cosas más difíciles fue verlo lucir tan saludable y joven. El había conseguido esa salud torturando a Lissa, y lo odie por ello. Si su enfermedad hubiera seguido su curso normal, el podría estar muerto ahora. El tenía entradas y cabello negro, con solo el más ligero toque de gris. Estaba en sus cuarenta y tenia un rostro real, casi atractivo, él volvió a ver cuando nos acercamos. Ojos de pálido jade como los de Lissa se encontraron con los míos. La familia Dragomir y Dashkov tenían mucha historia entrelazada y era horripilante ver el mismo color de ojos en alguien mas. Una sonrisa ilumino su rostro “Oh valla esto es un regalo. La adorable Rosemary prácticamente una adulta ahora”. Sus ojos se desviaron hacia Dimitri “Por supuesto alguien te ha estado tratando así desde hace tiempo” Presione mi rostro contra los barrotes. “Deja de estar jodiendo con nosotros, hijo de perra, que quieres”. Dimitri puso su mano gentilmente sobre mi hombro y me halo hacia atrás “cálmate Rose”. Respire profundo y lentamente retrocedí.
Víctor se coloco derecho en la silla y rió “después de todo este tiempo tu cachorra aun no aprendido a controlarse. Pero entonces quizás tu nunca quisiste que aprendiera.” “No estamos aquí para bromas” dijo Dimitri calmadamente. “Tu querías atraer a Rose, y ahora necesitamos saber porque” “¿Tiene que existir una razón siniestra? Solamente quería saber como le estaba hiendo a ella, y algo me dice que no vamos a tener la oportunidad de hablar amigablemente mañana.”
Esa molesta sonrisa se mantenia en su rostro y entonces decidí que era afortunado que el estuviera detrás de los barrotes y fuera de mi alcance. “No vamos a tener una charla amigable ahora”. Gruñí “crees que estoy bromeando, pero no. Realmente quiero saber como te esta hiendo. Siempre has sido algo fascinante para mi. Rosemary, la única persona besada por las sombras de la que sabemos. Te lo dije antes, esa no es el tipo de cosa de la que tu puedes escapar ilesa. No hay forma en la que tu puedas tranquilamente hundirte en el régimen de la rutina de la vida académica. La gente como tu no esta destina ha encajar.” “No soy algún tipo de experimento científico”
El actúo como si no hubiese dicho nada. ¿Cómo ha sido? Que has observado” “No hay tiempo para esto si no llegas al punto”. Advirtió Dimitri “nos iremos” No pude entender como Dimitri podía sonar tan calmado. Me incline y le di a Víctor la mas fría de mis sonrisas. “No hay forma de que te dejen libre mañana. Espero que disfrutes la prisión. Apuesto que será grandiosa cuando te enfermes de nuevo, y lo harás sabes”. Víctor me observo inquisitivamente, aun esa mirada de entretenimiento que hacia querer ahorcarlo. “Todas las cosas mueren Rose. Bueno excepto, tu supongo. O quizás tu estas muerta. No lo se. Esos que visitan el mundo de los muertos probablemente nunca puedan quitarse su conexión con él.”

Había una ruda replica en mis labios, pero me contuve. Esos que visitan el mundo de los muertos. Que si mis visiones de Mason no eran porque estaba loca o porque el estaba buscando venganza?. Que si había algo sobre mí- Algo que había pasado cuando morí y regrese, que ahora esta conectándome con Mason?. Fue Víctor el que primero había explicado que era lo que significaba ser una besada por los sombras. Me pregunto ahora si el tendrá alguna de las respuesta que he estado buscando.

Mi rostro debió revelar algo porque Víctor me miro especulativamente. “¿si?, ¿hay algo que quieras decir?”. Odie preguntarle algo, eso hacia que mi estomago se revolviera. Tragándome mi orgullo pregunte: “¿Qué es el mundo de los muertos?, es el cielo o el infierno?” “ninguno dijo” “¿Qué vive ahí?” exclame “¿fantasmas?, ¿voy a volver? ¿Salen cosas de ahí?”. Víctor estaba disfrutando que yo tuviera que recurrir a el por información, tal y como lo temí que lo haría. Vi esa maldita sonrisa intensificarse “Bueno claramente algunas cosas salieron de el porque aquí te encuentras, enfrente de nosotros”. ”esta tratando de que muerdas la carnada” dijo Dimitri. “Déjalo ir no le des importancia.” Víctor le dio a Dimitri una feroz mirada brevemente “la estoy ayudando”. Regreso con migo ”francamente? No se mucho al respecto, Tu eres la que ha estado ahí no yo, Rose. No yo. No aun. Algún día, tu probablemente serás la que me enseñe a mi. Estoy seguro que entre mas trates con la muerte, mas cerca te encontraras de ella”.

“Suficiente” dijo Dimitri, con voz dura, “nos vamos”. “Espera, espera” dijo Víctor con voz amable “Aun no me has dicho sobre Vasilisa”. Me acerque de nuevo “Mantente alejado de ella. Ella No tiene nada que ver con esto.” Víctor me miro secamente “Viendo como yo estoy encerrado aquí, no tengo mas opción que quedarme lejos de ella, querida. Y tu estas equivocada. Vasilisa tiene todo que ver con todo”. “Eso es” dije, repentinamente entiéndalo. “Por eso envistes la nota. Me querías aquí porque querías saber de ella, y sabias que no había forma que viniese hablar contigo personalmente. No tenias nada con que chantajearla.” “Chantaje es una fea palabra”. “No hay manera de que puedas verla – al menos fuera de la corte. Nunca va a sanarte. Te lo dije: te vas enfermar otra vez, y vas a morir. Tu vas a ser el que mande postales del otro lado.” “¿Crees que de eso se trata esto? Consideras mis necesidades tan mezquinas”. El tono burlón se había ido reemplazado por una ferviente y casi fanática mirada en sus ojos verdes. La apretada forma de su boca estrecho la piel de su rostro un poco, y note que había perdido peso desde nuestro ultimo encuentro. Tal vez la prisión havia si mas dura con el de lo que había pensado. "lo has olvidado todo, por que hice lo que hice. Has estado tan atrapada en tu propia forma de ver las cosas que has perdido de vista que perdiste de la gran pintura a la que yo estaba mirando." Busque en mi cerebro, pensando en aquel tiempo el otoño pasado. El tenía razón. Mi enfoque había estado en las cosas malas que el había cometido contra Lissa y contra mi personalmente. Había olvidado las otras conversaciones, sus locas explicaciones acerca de su gran plan. "querías preparar una revolución — aun quieres. Es una locura. No sucedera," dije. "y esta sucediendo. Crees que no se lo que esta sucendiendo alla afuera en el mundo? Aun tengo contactos. Las personas pueden ser compradas—como crees que fui capaz de enviarte ese mensaje? Se sobre la inquietud— se sobre los movimientos de Natasha Ozera para hacer que Moroi pelee con los guardianes. tu te pones a su lado y me difaman, Rosemarie, pero yo trate la misma cosa el otoño pasado. Aun asi, de alguna forma, no pareces tomarla de la misma forma que a mi." "Tasha Ozera esta trabajando en su causa un poco diferente de lo que tu lo hiciste," noto Dimitri. " y es por ello que ella no esta llegando a ningún lado," replico Victor. "Tatiana y su concilio están siendo retrasados por centurias de tradiciones arcaicas. Mientras ese tipo de poder nos rija, nda cambiara. Nunca aprenderemos a pelear. Los Moroi que no sean de la realeza nunca tendrán una voz. Dhampirs como tu serán continuamente enviados a batallas." "Es a lo que dedicamos nuestras vidas," dijo Dimitri. Pude sentir la tensión creciendo en el. El podrá mostrar mejor autocontrol que yo, pero sabia que se estaba poniendo igual de frustrado. "Y eso es por lo que pierden sus vida. Ustedes son solo esclavos y ni siquiera lo comprenden. Y por que? Por que nos protegen?" "por que … los necesitamos," dude. "para que nuestra raza sobreviva." "No necesitan arrojarse en batallas para ello. Hacer niños realmente no es tan difícil." Igonore su sarcasmo. "y por que los Moroi… los Moroi y su magia son importantes. Ellos pueden hacer cosas increíbles." Victor levando sus manos en exasperación. "Nosotros solíamos hacer cosas increibles. Los Humanos solían revenirnos como dioses, pero con el tiempo, nos hicimos perezosos. El avance de la tecnología hizo a nuestra magia cada vez mas y mas obsoleta. Ahora, todo lo que podemos hacer son trucos de Salon."
"Si teines tantas ideas," dijo Dimitri, con un peligroso resplandor en sus ojos negros, "entonces has algo útil en prisión y escribe un manifiesto."
"y que tiene que ver todo esto con Lissa?" pregunte. "Por que Vasilisa es un vehiculo para el cambio." Lo mire con incredulidad. "Crees que ella va a liderar tu revolucion?" "Bueno, Preferiria liderarla yo mismo—algún dia. Pero, aun asi, creo que ella será parte de ello. También e oído sobre ella. Ella es una estrella elevandose—aun joven, ciertamente, pero la gente la esta notando. Toda la realeza no es creada igual, sabias. El símbolo de los Dragomir es un dragon, El rey de las bestias. Igualmente, la sangre Dragomir siempre ha sido poderosa— por eso es que los Strigoi les han apuntado tan constantemente. El que un Dragomir regrese al poder no es algo pequeño—particularmente alguien como ella. Mi impresión por los reportes es que ella debe haber aprendido a controlar su magia. Si es asi—con su talento— no es posible adivinar que es lo que podría hacer. La gente es atraída hacia ella con casi nada de esfuerzo de parte de ella. Y cuando en verdad ella trate de influenciarlos … bueno, ellos harán lo que ella quiera." Sus ojos estaban muy abiertos mientras hablaba, maravilla y felicidad en su rostro al imaginar a Lissa viviendo sus sueños. "Increible," dije. "Primero querías esconderla para que te mantuviera vivo. Ahora en verdad la quieres en el mundo para usar su compulsión para tus propios planes Psicoticos." " te lo dije, ella es una fuerza para el cambio. Y justo como tu una besada por las sombras, ella es la única de su tipo que conocemos. Eso la vuelve peligrosa— y muy valiosa." bueno, eso era algo. Victor no omnisiente después de todo. El no sabia hacerca del uso del espíritu de Adrian. "Lissa nunca lo hara," dije. "ella no va a abusar de sus poderes." "y Victor no dira nada sobre nosotros," dijo Dimitri, halando mi brazo. "el a alcanzado su meta. Te trajo aquí por que quería saber de Lissa." "no descubrió mucho," dije. "te sorprenderías," dijo Victor. Le sonrió a Dimitri. "y que te hace estar tan seguro que no descubriré al mundo acerca de tus indiscreciones románticas?" "Por que no te salvara de la prisión. Y si arruinas a Rose, destruiras cualquier pequeña oportunidad que tenias de que Lissa te ayudara con tu torcida fantasia." Victor salto solo un poquito; Dimitri tenia razon. Dimitri puso un pie hacia delante, presionándose cerca de los barrotes como yo havia echo antes. Yo pensé que yo tenia una vos que daba miedo, pero cuando el dijo las siguientes palabras, comprendi que no estaba ni cerca. "y no tendría sentido de cualquier forma, por que no estarías vivo lo suficiente en prisión para preparar tus grandes planes. No eres el único con contactos."
Mi aliento se contuvo un momento. Dimitri había traído tantas cosas a mi vida: amor, comodidad, e instrucción. Me acostumbre tanto a el que algunas veces olvido lo peligroso que puede ser el. Estando de pie ahi, alto y amenazante mientras miraba con odio a Victor, sentí un escalofrió bajar por mi espalda. Recordé como cuando yo primero había llegado a la Academia, la gente había dicho que Dimitri era un dios. En este momento, el lucia como uno. Si Victor estaba asustado por la amenaza de Dimitri, no lo mostro. Sus ojos verde jade miraron entre nosotros dos. "Ustedes dos son una pareja hecha en el cielo. O en algún lado." "te veo en la Corte," dije. Dimitri y yo nos fuimos. En nuestro camino de regreso, el dijo algunas palabras en ruso al oficial de guardia. Por sus manierismos, sospecho que Dimitri le estaba dando las gracias. Nos aventuramos afuera, caminando a través de un grande, y hermoso espacio tipo parque para regresar a nuestros cuartos. La nevada se había detenido, y había dejado todo – edificios y arboles por igual—cubiertos en hielo. Era como si el mundo estuviese hecho de vidrio. Mirando a Dimitri, lo vi ver fijamente al frente. Era difícil de decir mientras caminábamos, pero podía jurar que estaba temblando. "estas bien?" pregunte. "si." "seguro?" "ta bien como puedo estarlo." "crees que le dirá a todos sobre nosotros?" "No." Caminamos en silencio por un momento. Finalmente pregunte lo que me había estado muriendo por saber. "lo dijiste en serio… que si Victor en verdad lo decía…que tu…" no pude terminar. No me pude obligar a decir las palabras harías que lo matasen. "no tengo mucha influencia en los niveles superiores de la realeza Moroi, pero tengo la suficiente entre los guardianes que se encargan del trabajo sucio en nuestro mundo." "no respondiste la pregunta. Si realmente lo harias." "haría muchas cosas para protegerte, Roza." Mi corazón latió. El solo usaba "Roza" cuando se sentía particularmente afectivo hacia mi. "eso no seria exactamente protegerme. De hecho seria algo—sangre-fria. Tu no haces ese tipo de cosas," le dije. "la venganza es mas como algo mio. Tendría que matarlo."
Lo dije como una broma, pero el no pensó que fuera gracioso. "no hables asi. Y de cualquier manera, no importa. Victor no dirá nada." El me dejo entrar en su cuarto cuando entramos. Mientras estaba abriendo la puerta al mio, Lissa rodeo la esquina del pasillo. "allí estas. Que sucedio? Te perdiste la cena." Lo había olvidado por completo. "lo siento … me deje llevar por cosas de guardianes. es una larga historia." Ella se había cambiado para la cena. Su cabella aun estaba amarrado hacia arriba, y estaba usando un vestido ajustado a su cuerpo hecho de seda plateada. Lucia hermosa. Lucia real. Pensé sobre las palabras de Victor y me pregunte si ella podría ser la fuente de cambio que el pensó que ella era. Viendo como lucia ahora, tan glamorosa y compuesta, pude imaginarme a la gente siguiéndola todas partes. Ciertamente podría, pero entonces, yo era parcial. "por que me miras así?" pregunto con una sonrisa. No podía decirle que acababa de ver al hombre que mas la atemorizaba. No podía decirle que mientras ella había estado divirtiéndose, yo había estado cuidando su espalda en las sombras, como siempre hago. En su lugar, le devolví la sonrisa. "me gusta el vestido”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario